Residentes de la organización Sarah Gabriela del municipio Santo Domingo Norte, denunciaron que el mal estado de las calles y la oscuridad de las vías ha convertido al sector en caldo de cultivo para los delincuentes, produciendo asaltos a mano armada a todas horas del día.
Los baches y el mal estado del asfalto no solo dificultan el tránsito de los vehículos, también facilitan las acciones delictivas.
La oscuridad de las calles dificulta la visibilidad de los peatones y los vehículos, aumentando el riesgo de ser atracados por los delincuentes.
Además, las calles en mal estado y oscuras pueden ser utilizadas por los delincuentes como escondites o para cometer sus delitos sin ser vistos.
Los residentes de la urbanización Sarah Gabriela están en riesgo de sufrir asaltos a mano armada a todas horas del día. Esto es una violación de sus derechos y una amenaza a su seguridad.
El Ayuntamiento de Santo Domingo Norte debe tomar medidas urgentes para mejorar el estado de las calles de la urbanización Sarah Gabriela. El arreglo de las calles y la instalación de iluminación en las vías contribuiría a reducir el riesgo de delincuencia y mejorar la seguridad de los residentes.
El señor Pablo Montero, residente en la urbanización Sarah Gabriela, se refirió al mal estado de las calles y dijo que los delincuentes aprovechan las calles oscuras y en mal estado para cometer sus delitos sin ser vistos.
"El Ayuntamiento de Santo Domingo Norte junto con el Gobierno, deben tomar medidas urgentes para mejorar el estado de las calles de la urbanización Sarah Gabriela. El arreglo de las calles y la instalación de iluminación contribuiría a reducir el riesgo de delincuencia y mejorar la seguridad de los residentes.", agregó.
Los residentes denunciaron que hace unas semanas, dos asaltantes mataron a un hombre que se dirigía a su lugar de trabajo. Asimismo, afirmaron que más recientemente un niño del sector fue asaltado por delincuentes para quitarle un celular.
“Todo esto ocurre en la entrada, es que eso está muy oscuro y se ha convertido en una especie de peaje para los delincuentes”, dijo
Isabel Beltrán. es una madre residente en Sarah Gabriela, que expresó preocupación debido a que los niños del sector llegan tarde a las escuelas. Dijo que esto se debe a que los operadores de transporte escolar temen entrar a tempranas horas por temor a ser asaltados.
Otra víctima de delincuencia fue José Matos, vendedor de embutidos, quien narró a elCaribe que hace unas semanas fue asaltado por dos individuos que viajaban en una motocicleta, cargando con parte de la mercancía que debía entregar en colmados de la zona.
“Eran las 7:00 de la mañana, parece que me estaban acechando, porque me salieron de la nada. No pude avanzar en la camioneta porque había mucho lodo y hoyos, lo que les dió tiempo a encañonarme”, agregó Matos.
En ese sentido, Angela Escoto, miembro de la Junta de Vecinos, señaló que por el mal estado de las calles, unos antisociales la abordaron para quitarle su cartera.
“Realmente es un peligro, yo venía despacio por los hoyos y se me acercó un hombre en un motor y me dijo que le entregue el celular y me sacó una pistola”, dijo Escoto.
En la entrada del sector Sarah Gabriela, hay un letrero, anunciando el Plan Nacional de Asfaltado que ejecuta el Ministerio de Obras Públicas, cuyo contratista es Inaval Constructora.
Rosalina Atidor, presidente de la Junta de Vecinos de Sarah Gabriela, expresó que hace meses iniciaron los trabajos de reparación de las calles, pero sorpresivamente se llevaron las maquinarias y ahora las calles están en peores condiciones debido a las lluvias.
Agregó que el ingeniero a cargo de los trabajos le informó que la obra estaba paralizada por falta de fondos.
“No entiendo porque dejaron las calles rastrilladas, ahora cuando llueve las calles están peor y nosotros sufriendo con nuestros vehículos ya que se dañan a cada rato”, expresó Ramón Emilio, residente en Sarah Gabriela.
Ivelisse Rosario pidió a las autoridades que vuelvan antes de diciembre a terminar el trabajo que iniciaron, o de lo contrario la comunidad no tendrá más remedio que lanzarse a las calles a reclamar el arreglo de sus calles.